¿Cómo actuar ante la mordedura de una mascota?
Las mordeduras de animales son, lamentablemente, muy comunes. Pueden morder porque se sienten amenazados, porque están protegiendo su cría o territorio o porque están enfermos. La gran mayoría de las mordeduras son producidas por perros y en menor medida por gatos y roedores.
Aproximadamente un 10% de las heridas por mordeduras con atención médica requieren suturas y controles posteriores y un mínimo porcentaje necesita internación. En todos los casos, siempre es indispensable controlar que la herida no se infecte, algo habitual debido a los microorganismos propios de la flora de la piel de la víctima y la cavidad oral animal. No es raro que las infecciones sean polimicrobianas.
La mayoría de las mordeduras de animales se dan en niños de entre 5 y 9 años de edad y sobre todo durante los meses de verano. En alrededor de la mitad de casos, la agresión es principalmente en las manos y brazos, aunque en los niños más pequeños, debido a su menor altura, es en la cabeza, cuello y cara. Muchas mordeduras son ocasionadas por animales conocidos por el niño (su mascota, la de algún vecino o familiar) más que por animales salvajes o desconocidos.
La mordedura de un perro es raramente letal si no afecta a grandes vasos, tórax o penetra en órganos vitales.También las mordeduras de gatos por su carácter punzante pueden alcanzar alguna articulación. Es importante buscar signos de infección más profundamente del lugar de inoculación en las heridas punzantes de los gatos. En niños con inmunodepresión, las mordeduras aparentemente insignificantes pueden causar una grave infección.
¿Qué hacer ante una mordedura?
Lavar la zona herida con agua y jabón. Comprimir con un paño limpio para cortar la hemorragia. Aplicar Pervinox o similar para reducir riesgo de infecciones y cubrir con una gasa o apósito.
Si pasados los 15 minutos, el sangrado no se detiene, es necesario llamar a un médico. Lo mismo si hay sospecha de una herida profunda o si la mordedura fue en la cara, el cuello o la cabeza.
Si desconoce el origen del animal o si cree que hay riesgo de transmisión de rabia, se recomienda lavar con abundante agua jabonosa y llamar a un médico que determine si es necesario iniciar profilaxis.
Precauciones para evitar mordeduras
- Los niños pequeños no deben quedarse solos con una mascota, aunque sea de la familia.
- Enséñeles a los niños a no acercarse a animales extraños porque nunca se sabe cómo podrían reaccionar
- Si ve animales peleando, no intente separarlos
- No moleste a los animales solos mientras comen.
- Si tiene un perro, llévelo siempre con correa, aunque sea dócil.
Fuentes:
- Recomendaciones para el manejo de mordeduras ocasionadas por animales. Leonor Jofré, Cecilia Perret, Katia Abarca, Verónica Solari, Roberto Olivares y Javier López, en representación del Comité de Infecciones Emergentes, Sociedad Chilena de Infectología.
- Infecciones por mordeduras. F. Álvez González. Servicio de Pediatría. Hospital Clínico Universitario. Santiago de Compostela.